comparti mi espanto

Saturday, August 02, 2008

TRES DE MAYO DE ESE AÑO

Me siento la peor.
Y no exagero.
Involuntariamente, pero por BOLUDA, herí a mi hijo mayor.
Sí, para variar, no supe expresarle bien al peluquero qué corte quería que le hiciera.
Debí haber dicho FUERTE Y CLARITO: sacále dos o tres centímetros de largo y apenitas dale un par de tijeretazos a los costados.
Pero no, no fui clara y ahora tiene un corte raro, no se halla...
Y el pelo largo y así como lo tenía antes, a él le daba seguridad, la gente lo "aprobaba"...
Siento como si lo hubiera "castrado", como si le hubiera hecho un daño muy feo, un daño que SE PUDO HABER EVITADO.
Sé perfectamente que la apariencia no lo es todo, que a lo largo de su vida deberá "sortear" muchas situaciones angustiantes y frustraciones.
Pero esto... SE PUDO HABER EVITADO.
Y ahora hay que esperar mucho tiempo para que le vuelva a crecer.
Es imperdonable.
No me lo perdono.
Me debe odiar por esto, y si es así, tiene razón.
Ay, si pudiera volver el tiempo atrás.
No era cuestión de ir a esa peluqería "cool" que me recomendaron y pagar caro.
Era muy simple, era cruzar a la peluquería del barrio y transmitir claramente y con seguridad
qué corte quería para mi hijo.
Boluda, boluda, boluda...
¡Ay, qué boluda!
Nunca debí haber existido.
Soy un error en esta vida.
Sólo hago cagadas.
Y es verdad que los tres varones con los que me toca convivir "sobredimensionan" esas cagadas.
Pero esas cagadas existen.
Y yo, si no fuera el error que soy, no las cometería.
¡BOLUDA!
29 DE ABRIL DE ESE AÑO

Que la plasticola con brillitos colorados, que la caja de zapatos, que la botella de litro y medio vacía, que caramelos para esa festividad, que tapitas de yogur...
Es permanente lo que piden en las escuelas de mis hijos.
Termino de conseguir algo y ya hay otro pedido.
A todo esto hay que sumarle las figuritas del momento, ropa y calzado para ambos, que el cordón de las zapatillas se rompió, que al pantalón se le hizo un agujero, que a mi marido se le desprendió un botón y así...
Y ahora se agregó un nuevo rubro: el Prode!
Debo acordarme de retirar las tarjetas correspondientes en tiempo y forma, procurar que las llenen mis hijos y mi marido y llevarlas nuevamente al local.
Y todos los pagos que hay que hacer: tres tarjetas de crédito, impuestos de casa, del Estudio, de la casita de la costa, de ambas escuelas y de ambos comedores, transporte privado de ambos hijos, escuelita de fútbol, escuelita de tenis y a la señora que limpia en casa.
Y hay que aprovisionar al Estudio y a la casa e papel higiénico, bebidas y más etcéteras.
Ah ! Y no olvidarme de la compra de regalos de familiares, amigos, compañeros de la escuela o de enviar a través del cuaderno de comunicaciones el dinero correspondiente.
Y desayunar con mi mamá una vez por semana, revisar ambas mochilas a diario, ocuparme de la ropa, de que se bañen, de despiojarlos, de la cena, de escribirle a la señora que me ayuda con la limpieza...
Y de preparar el bolso de natación los miércoles y que no se olvide del tablero los viernes!
Ah! Y grabarle a mi mamá "Justicia Ciega" porque no tiene ni quiere tener Cable.
Y pedir turnos con los médicos y llevarlos. Son chicos sanos pero al menos una vez al año deben ir a controles con la Oftalmóloga, la Pediatra, el Hebiatra, la Dentista, la Ortodoncista...
Y ahora...
Mañana vienen visitas.
Se me había dado: mi hijo mayor en un cumple, mi hijo menor con mi mamá.
"Piedra Libre" para "dar vuelta la casa" y ordenar y preparar todo para mañana...
Pero no, mi hermano menor está en mi casa poniendo la nueva lectora.
Ya no tengo libertad absoluta como hubiera sido ideal.
Por Dios!
Y esta semana hubo una actividad especial en la escuela de uno de mis hijos con motivo de una festividad y la semana que viene una charla a la que queremos ir...
¿Habrá una semana "tranqui"?
Siento que las listas nunca se acaban, que tacho algo que hice, pero anoto dos cosas nuevas para hacer.
Y cuando todo parece tranquilo...
¡Zas!
Abro el correo electrónico y hay invitación a un almuerzo familiar para el día sábado!!!!
Y para nada me extrañaría que justo ese mismo día a mis hijos les toque jugar en la escuelita de fútbol (o peor, de visitantes) o que mi hijo mayor sea invitado a un Bar o Bat Mitzvá o que juegue el equipo del que son fanáticos o que se tengan que cortar el pelo...
Y cuando todo parece calmarse... alguien que no veo hace años se casa (la hija de una prima, el primo de mi mamá), o aparece la invitación a un Bar Mitzvá (hijos de mis primos mellizos).
¿Siempre será así?
¿De estas cosas se compone la vida?
¿Así es vivir?
¿Vivir es confeccionar listas y cumplirlas?
¿Vivir es tener permanentemente cosas pendientes para hacer, compromisos sociales que cumplr?